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07/11/2014

Ya no es tan amarga la tierra

Más allá de la polémica sobre la conveniencia de la ley de ocho horas para el medio rural, ¿cómo impactaron las reformas laborales en los trabajadores del campo?
Álvaro Levín / @alvarolevin / Sudestada

La situación de los trabajadores rurales y la pretendida inconveniencia de la ley de ocho horas para las labores del campo entraron en el debate electoral después que el candidato opositor Luis Lacalle Pou planteó su intención de revisar la legislación. Sin embargo, rápidamente el asunto quedó en la anécdota, y no se profundizó en las consecuencias que tuvo sobre la peonada la serie de medidas adoptadas en los últimos años a fin de avanzar en la dignificación de las labores agrarias.

El resultado de las elecciones y el triunfo del partido de gobierno en la suma total de votos del interior -y especialmente en algunos departamentos donde la izquierda nunca había logrado la victoria- replanteó la discusión y puso el foco sobre la incidencia de las políticas orientadas a la población rural. Y aquel inesperado cuestionamiento a la ley de ocho horas en el medio rural tomó otro significado.

La explicación de Lacalle Pou para defender su voto contrario a la ley de ocho horas en el campo fue el detonante de la polémica:



El pronunciamiento puso en alerta de forma inmediata a la Unión Nacional de Asalariados, Trabajadores Rurales y Afines (UNATRA), que salió al cruce del postulante opositor: