Tiempo estimado de lectura:
18/07/2019

PIT-CNT pide derogar ley que homenajea a miembro del escuadrón de la muerte

Base Naval de La Paloma se denomina “Ernesto Motto”, partícipe del secuestro de Héctor Castagnetto. Decreto de Bordaberry fue convertido en ley durante el gobierno de Lacalle

Foto: La Paloma Hoy

Walter Pernas / Sudestada / @PernasWalter

En los últimos años, a influjo de la lucha de la sociedad civil, el Estado ha cumplido con generar espacios de memoria –por ejemplo en lugares que resultaron emblemas del terrorismo de Estado– como parte de las acciones que buscan sustentar las llamadas “garantías de no repetición” de violaciones a los derechos humanos, como las que se cometieron en la época de los gobiernos autoritarios o dictatoriales.

Sin embargo en el balneario La Paloma se mantiene, como bastión de la represión de los años setenta, un apostadero de la Armada Nacional que lleva el nombre de “capitán de corbeta Ernesto Motto”.

Motto era un integrante del denominado Comando Caza Tupamaros/Escuadrón de la muerte, organización que asesinó a Manuel Ramos Filippini e Ibero Gutiérrez e hizo desaparecer Abel Ayala y Héctor Castagnetto, jóvenes vinculados a la izquierda revolucionaria.

El capitán Motto participó del operativo clandestino que se montó en agosto de 1971 para secuestrar a Castagnetto, quien luego fue torturado y desaparecido, de acuerdo a las investigaciones históricas y a la indagatoria liderada por el fiscal especializado en crímenes de lesa humanidad, Ricardo Perciballe.

El 14 de abril de1972 el Movimiento de Liberación Nacional/Tupamaros mata a balazos a cuatro integrantes del escuadrón de la muerte, entre ellos al capitán Motto.

El 5 de junio de 1973, tres semanas antes de convertirse en dictador –con todas las letras–, el presidente Juan María Bordaberry decreta que la base naval de La Paloma se llamaría desde entonces “capitán de corbeta, Ernesto Motto”, en homenaje al funcionario muerto a manos de los tupamaros.



En aquel contexto de agonía democrática una decisión gubernamental de esa naturaleza no resultaba extraña. Pero nueve años después de terminada la dictadura, el 13 de setiembre de 1994 –en las postrimerías del gobierno de Luis Alberto Lacalle y en plena campaña electoral–, el Poder Legislativo le dio carácter de ley a aquel decreto de Bordaberry. La iniciativa fue aprobada por votos blancos y colorados, con la oposición del Frente Amplio.

Al cumplirse 25 años de aquella decisión, el próximo 13 de setiembre el Parlamento tendrá que comenzar a discutir nuevamente el tema y luego adoptar una nueva decisión al respecto.

Ese día el Plenario Intersindical Social María Romana de La Paloma, Rocha, concurrirá al Palacio Legislativo para realizar el pedido formal de derogación. La organización lanzó, el pasado 27 de junio, una “campaña de firmas de adhesión a la solicitud de quitar el nombre de Ernesto Motto a la Base Naval de La Paloma”. Las adhesiones tendrán un carácter simbólico, de acuerdo a la organización sindical.

Este miércoles 17 de julio, la Mesa Representativa Nacional Ampliada del PIT-CNT declaró su “apoyo a la iniciativa del Plenario de la Paloma de recolectar firmas para presentar ante el Parlamento una solicitud de modificación del nombre del Apostadero Naval de La Paloma, denominado Capitán de Corbeta Ernesto Motto Benvenuto, integrante de los escuadrones de la muerte”.



Acto seguido, el presidente de la central de trabajadores, Fernando Pereira, y el secretario general, Marcelo Abdala, entre otros, firmaron la planilla de adhesiones.

“No queremos más la Base Naval con nombre de un asesino”, reza la proclama del Plenario Intersindical Social.


Aliados de Sudestada